Fruta tropical y mediterránea

Fruta tropical y mediterránea

Antes de que los buques de vapor comenzaran a atravesar regularmente los mares, en el siglo XIX, el comercio de frutas perecederas tales como los plátanos y las piñas era imposible. Actualmente, toda clase de frutas exóticas llegan por avión o por barco y muestran su exótica apariencia entre las que nos son más familiares; además, hacen su aparición en la época del año en que habitualmente, aparte las naranjas, la fruta fresca escasea.

Plátanos

Plátanos

De esta fruta existen muchas variedades. Los plátanos para cocinar tienden a ser más harinosos y menos dulces que los que se comen crudos, y con frecuencia se usan antes de que estén maduros. Hay una variedád que se cultiva únicamente para hacer cerveza, y hay plátanos rojos, plátanos de color púrpura y plátanos rosados, como delgados y gordos como cerditos. Los plátanos para mesa se cosechan cuando todavía están verdes y duros, y es posible que al llegar a las tiendas no estén aún del todo maduros. Sin embargo, maduran rápidamente a temperatura ambiente, poniéndose primero amarillos, cubriéndose de manchitas cuando están a punto para com

Plátano de Canarias

Plátano de Canarias

El Plátano de Canarias, debe sus características específicas a su zona de producción, las islas Canarias. Su configuración montañosa y su abrupto relieve unido al variado clima de las Islas, con temperaturas suaves y poco contrastadas, han permitido la producción de un producto único, Plátano de Canarias. Por otro lado, las condiciones edafológicas que requiere el cultivo de la platanera han exigido a los agricultores canarios, a lo largo de la historia, un gran esfuerzo, puesto que su cultivo requiere crear bancales o terrazas donde sólo había piedras volcánicas. El Plátano de Canarias es de la variedad Cavendish del género Musa (AAA) spp

Piñas

Piñas

Una piña entera sobre la mesa es un espectáculo realmente suntuoso. Las piñas frescas forman parte de muchos platos en su habitat tropical nativo, donde son abundantes y baratas, y es en los trópicos donde se originó la idea de servirlas calientes, como acompañamiento de aves de corral, chuletas de cerdo y jamón. La piña es mejor cuando es fresca y cuando se sirve simplemente con azúcar y tal vez con un toque de kirsch, aunque ahora que se importan en cantidades importantes se ven a veces fritas, asadas enteras al horno, flameadas con canela y ron, rociadas con zumo de lima; intervienen también en la preparación de diversos rellenos para to

Mangos

Mangos

Estas hermosas frutas, pueden ser tanto del tamaño de melones como de manzanas. Pueden ser verdes, doradas, rosadas o una mezcla de los tres colores. La pulpa, de un rosa dorado vivo de los mangos maduros, es tersa y sin fibras, con un sabor que se ha comparado al de los melocotones, albaricoques, melones y piñas. Cuando se compran mangos hay que asegurarse de que estén apenas tiernos y tengan buen perfume. Si están completamente verdes no llegarán a madurar, los que tienen grandes zonas negras están maduros en exceso. Los mangos son engorrosamente difíciles de comer. Generalmente se entallan en varias partes en toda su superficie para

Papayas

Papayas

Colón declaró que estas frutas, a las que él llamaba melones arbóreos, cuando estaban maduras parecían «comida de ángeles». La papaya verde, a la que también se llama lechosa, se usa como una verdura. La piel de la papaya va del color verde al dorado, tiene pulpa anaranjada y semillas negras y brillantes. Generalmente llega al mercado cuando está madurando y es de sabor dulce y sutil. Al comprarlas, hay que fijarse en que sean firmes y sanas, aunque tengan motitas, y que estén apenas amarilleando, lo que les dará tiempo a madurar en casa. Lo mismo que un calabacín, cuando no está madura la papaya se puede servir rellena u horneada con man

Guayabas

Guayabas

De carne rosada y dulce, pueden oscilar desde el tamaño de una nuez al de una manzana. Se pueden servir en puré u horneadas, o comerlas frescas con azúcar y crema, también combinan bien con otras frutas, tales como piñas o plátanos. Por lo que mejor se las conoce es, sin embargo, por su jalea, que se sirve con carne o caza como alternativa a la habitual jalea de grosellas rojas. Si se prepara en casa, unas gotas de salsa worcester en su zumo le darán un sabor más interesante. La jalea de guayabas también es deliciosa servida sobre tostadas calientes.

Granadas

Granadas

La alondra —que la Julieta de Shakespeare insistía en llamar ruiseñor— «cantaba sobre aquel granado», arbusto introducido en Occidenté desde Persia, pasando por Africa. Su fruta hermosamente modelada, dorada por fuera y llena de granitos de color carmesí, cada uno con una semilla en el centro, es de una construcción intrincada. Para mejor admirar su color, corte la fruta por la mitad o en segmentos, venciendo la resistencia de la cáscara, rosada y coriácea. Aunque la pulpa jugosa que rodea a cada semilla es sumamente refrescante u aromática, es bastante engorrosa de comer. Se pueden coger algunos granos, chupar la carne para separarla de

Caquis

Caquis

Cuando están maduros y buenos se comparan por su sabor con las guayabas bastante empalagosas, los albaricoques, los tomates y los mangos, pero su sabor astringente cuando les falta madurez «pone la boca dolorosamente de través». Por eso no hay que temer jamás los que están arrugados, porque cuando el caqui ha llegado a esta etapa, es seguro que su acidez y el tanino han desaparecido. Sin embargo, estas hermosas frutas de color rojo anaranjado se mantienen brillantes y llenas cuando han sido recogidas temprano y maduradas artificialmente. Si están maduros y blandos, con el tallo y la punta intactos, se les puede cortar la piel, dura y resist

Kiwis

Kiwis

La piel marrón y velluda que cubre a esta fruta de forma ovalada oculta una carne verde, brillante y traslúcida, con decorativas semillas negras comestibles. Tras haber sido llamada «carambola», y también uva espina china y de Coromandel, se conoce hoy por el nombre del ave nacional de Nueva Zelanda, el kiwi. La fruta es mucho más atractiva cuando se la pela y se corta en rodajas delgadas, ya que el dibujo que forman las semillas negras sobre la carne verde es muy agradable.

Fruta de la Pasión

Fruta de la Pasión

Es el fruto de la planta en cuya flor se cree ver la representación de la Pasión de Cristo. En las Antillas, al fruto de algunas especies de fruta de la Pasión se les llama también granadilla o calabaza. Es del tamaño y la forma de un huevo, con una piel dura, de color marrón purpúreo, que se va arrugando a medida que el fruto madura. Su carne aromática es imposible de separar de las semillas, abundantes y pequeñas, que son comestibles. Generalmente se sirve cortada por la mitad y rociada con jerez o crema, o bien se retira la carne de la cáscara y se mezcla en ensalada de fruta.

Guanábanos

Guanábanos

Son los frutos carnosos, redondos o alargados y de piel gruesa de la gran familia de las anonáceas, árboles de los trópicos americanos. Entre ellas está la chirimoya, con forma de manzana, y la ilama, cuyo sabor ha sido comparado con el del plátano y la piña. La soncoya es similar, pero más grande, y la anona, de color verde, con carne blanda, dulce y aromática, sabe a flan. También hay una variedad de anona ácida, de forma acorazonada y color verde, de sabor parecido al de las grosellas negras. Todas ellas se comen frescas, a veces heladas para el desayuno, sacando la pulpa de la cáscara con una cuchara.

Loquats

Loquats

Conocidos también como albaricoques silvestres japoneses, tienen el tamaño de manzanas silvestres, pero son de forma más cónica. Aunque apagan la sed, no son muy sabrosos cuando están crudos y se usan principalmente para mermeladas, jaleas y salsa, en las que se suele incluir algunas semillas, que dan un delicioso sabor de almendras amargas a cualquier conserva o salsa a la cual se agreguen.

Uva espina del Cabo

Uva espina del Cabo

Nativa de América tropical, esta pequeña fruta, sabrosa y agridulce, del arbusto Physalis peruviana viene encerrada en unos globos de consistencia parecida al papel, que parecen farolillos chinos. En Sudáfrica se cultivan en una escala tal que la variedad ha llegado a ser conocida como uva espina del Cabo. Las bayas, que cuando están maduras son doradas, se pueden comer con los dedos o recubrirlas con fondant y servirlas con pastitas, pero se usan principalmente para hacer las más deliciosas jaleas y mermeladas.

Litchis y rambutanes

Litchis y rambutanes

Los litchis son conocidos porque se sirven en almibar después de una comida china. Sin la cubierta nudosa y el hueso marrón y brillante, parecen medias lunas traslúcidas. En China, el litchi ha sido cultivado durante miles de años y, debido a su sabor agridulce, se usa como complemento de platos de cerdo y pato, tal como en Occidente se suele dar el mismo uso a las manzanas y las naranjas. Un rambután tiene la piel más velluda que el litchi, pero en el sudeste asiáticó le dan los mismos usos. Ambos se pueden conseguir en Occidente, pero no hay que comprarlos si se ven arrugados, porque ello significa que la pulpa se está volviendo negra y

Higos chumbos

Higos chumbos

Son el fruto del cactus de este nombre. Tienen forma de pera y su color varía del verde al rosado; vienen cubiertos de agudas espinas. Al comprarlos hay que fijarse en que tengan un color razonablemente vivo y estén firmes, pero no demasiado duros. Son de sabor suave y dulce, y se suelen comer crudos. Hay que cortar el fruto a lo largo y entonces se desprenderá fácilmente la piel espinosa. La carne se puede comer con azúcar y crema, o bien sazonada con zumo de limón.

Mangostanes

Mangostanes

Estas frutas delicadas, de color púrpura, con la piel reluciente y blanca y de carne blanda y agridulce, segmentada como la pulpa de la naranja, son muy populares en el sudeste asiático. Son de sabor refrescante, similar al de la piña.

Higos

Higos

Son quizá la más sensual de todas las frutas, con su piel que parece estallar y su carne suculenta. Los antiguos griegos los consideraban una comida tan sana que formaban parte de la dieta de los atletas que intervenían en los juegos Olímpicos, y tan deliciosos que poetas y filósofos cantaron sus loores. Blancos, verdes, negros o purpúreos, los higos siempre son hermosos, y una vez cortados queda al descubierto su pulpa carnosa, de un color púrpura intenso, rojo o rosado, llena de minúsculas semillas. El fruto entero es comestible, y en Italia —donde los higos sicilianos son los más apreciados— los sirven con jamón, o bien como postre. En

Dátiles

Dátiles

Cuando son frescos, los dátiles tienen una piel marrón brillante, que lamentablemente promete una pulpa más jugosa que la que tienen en realidad; incluso los más llenos tienen una consistencia parecida a un bombón. Al comprar dátiles frescos hay que cuidar de que sean grandes, de piel tersa y nada pegajosa.