Mantequilla
Los expertos pueden saber de dónde procede una mantequilla, basándose en el color, la consistencia, el sabor y el aroma. La más admirada es la mantequilla de Normandía, cremosa y de color marfil, y muy especialmente la de Issigny. Derretida, se parece a la crema. Untada sobre el pan, tiene un sabor suave, como de nuez, y es de consitencia lisa y firme. No contiene gotas visibles de agua (si la mantequilla contiene más de un 12 por ciento de agua, no resultará cremosa), no se desmigaja al apretarla y es de aroma delicado y suave. Es todo lo que puede aspirar a ser la mantequilla, y vale la pena comprarla para alguna ocasión especial, por