Salchichas de hígado

Libro de cocina
[Gastronomía]


Tiempo aproximado de lectura (en minutos): 1

Pueden ser grandes o pequeñas, curvadas o rectas, llevar la carne picada fina o gruesa, pueden contener también trocitos de grasa, de hígado (lo que es especialmente sabroso, en el caso de los embutidos de hígado de pato), trufas y cualquier hierba aromática finamente picada.

Algunas salchichas de hígado son blandas y pastosas, adecuadas para untar, otras, como las de Estrasburgo, hechas con carne de cerdo, están ahumadas, se preparan de manera que se puedan cortar en lonchas gruesas.

Todas las salchichas de hígado se pueden comer tal cual, pero en ocasiones son un ingrediente esencial de algunos platos cocidos: la sopa negra sueca, por ejemplo, necesita el gasleverkorv sueco.

Además de hierbas aromáticas y trufas, los condimentos pueden incluir nuez moscada, canela, cebollas salteadas o anchoas; cuando predominan estas últimas, la salchicha se llama Sardellenwurst.

La mayor parte de las salchichas de hígado se hacen con hígado de cerdo, mezclado con carne de cerdo o ternera —algunas contienen otros despojos, además del hígado—, pero también hay salchichas de puro hígado.

Las de hígado de ternera son especialmente buenas, y las hay también hechas con hígados de aves de caza.